“He vivido con varios Maestros Zen, todos ellos gatos» Eckhart Tolle

En este artículo vamos a aprender cómo practicar Mindfulness con animales. No hay duda de que los animales son grandes amigos de los seres humanos. Quizás solo aquellas personas que hemos tenido o tenemos la suerte de convivir con ellos sabemos realmente el tipo de unión y conexión que podemos llegar a tener con ellos. Conocemos la nobleza de su alma, el amor desinteresado y la entrega profunda de unos seres que lo dan todo por aquellos que son algo más que sus simples amos.

Son de sobra conocidos los grandes beneficios que aporta, tanto en niños como en adultos, la convivencia con los animales. Pero, ¿sabes cómo puedes conectar tu práctica de mindfulness con ellos?

Los animales son grandes maestros de mindfulness. Vamos a mirarlos desde otra perspectiva y a compartir con ellos grandes momentos de atención plena y de saboreo de la vida.

Puede ser que no tengas un mascota propia, ¡no importa!. Puedes practicar con la mascota de algún familiar o de algún amigo. Puedes incluso practicar con algún animal de un refugio de animales donde lo permitan.

Te invito a que leas algunas sugerencias sobre cómo para practicar mindfulness con animales de manera sencilla y ¡a que las pruebes! No te dejarán indiferente.

MINDFULNESS EN LOS SENTIDOS

Los animales nos ayudan a aliviar el estrés. Múltiples estudios muestran que simplemente interactuar con las mascotas puede mejorar la calidad de vida aliviando el estrés e incluso aliviando la depresión en algunas personas. Simplemente el tener contacto visual con un perro puede aumentar la oxitocina, que es una hormona de unión importante. Las caricias y los abrazos liberan un neurotransmisor de humor positivo llamado serotonina, al tiempo que reducen la hormona del estrés, el cortisol.

Puedes realizar una práctica de atención plena en los sentidos compartiendo un momento relajado con tu mascota. Puede ser en la posición que tú elijas. Por unos instantes, puedes ser consciente de todo relacionado con tu mascota. Con curiosidad, como si fuera la primera vez, puedes mirarla primero, observando los pequeños detalles que conforman los rasgos faciales de tu mascota; los bigotes, las pestañas y las minúsculas marcas que le dan a tu animal de compañía una apariencia única. Puedes observar el color de su pelaje o de sus plumas, la forma de su cuerpo y el tamaño de sus extremidades.

A continuación puedes acercarte a ella, si te lo permite, y olerla. Con ojos abiertos o cerrados, ¿qué percibes con tu olfato? Puede oler a jabón, a hierba… o simplemente no detectes ningún olor en especial, no importa. Toma consciencia de ello.

Puedes continuar con el tacto, empezando a tocarla muy lentamente, con total presencia y atención, sintiendo su pelaje o sus plumas. Apreciando su temperatura, quizás sintiendo su respiración y los movimientos que realiza su cuerpo al respirar. Puedes observar cómo recibe tus caricias, quizás se acerque más a ti pidiendo más mimos o haga algún sonido. Puede moverse o adoptar otra postura desde donde puedas alcanzar a tocar otras partes de su cuerpo…

Observamos con atención y si te acurrucas a su lado, ¿qué percibes? ¿Puedes sentir sus latidos mientras te vuelves más consciente del tuyo?. ¿Puedes sentir su respiración mientras percibes la tuya?.

Al acabar, toma consciencia de tu estado y de tu emoción o emociones. ¿Cómo estabas antes de empezar la práctica y cómo te encuentras ahora? ¿Ha cambiado algo? ¿Qué emoción o emociones estás sintiendo aquí y ahora?

MINDFULNESS EN POSICIÓN TUMBADA

Haz una prueba. Practica cinco y diez minutos de mindfulness en posición tumbada. Puede ser  por ejemplo una práctica en la respiración o en la consciencia corporal, como tú quieras. Si has dejado la estancia donde te encuentras accesible, quizás antes de que te des cuenta tu mascota (gato o perro…) puede que esté ¡encima de ti o recostado a tu lado!. Son varias las personas que lo han experimentado y yo misma puedo dar fe de ello… Es como si fueras un imán para ellas.

Si es así, practica mindfulness en ese preciso instante. Manteniendo tus ojos cerrados, siente su presencia, su contacto, su olor, su respiración a tu lado o sobre ti, sus movimientos naturales…su ronroneo, si es un gato. Percibe sus caricias, si te las da… observa cómo te sientes en su compañía. Qué emociones afloran…  escucha tu corazón. Después de esta toma de consciencia, quizás quieras continuar con una práctica de agradecimiento hacia ese ser que acompaña tus días… ¿Qué sientes hacia él o ella? ¿Qué sentimientos le quieres trasmitir? ¿Qué querrías decirle? Conecta con tu interior y desde allí, puedes enviarle tu agradecimiento o bondad amorosa…

Es vuestro espacio, vuestro tiempo, vuestra conexión. Algo único en ese instante.

«Cuando practicas estar completamente presente y totalmente comprometido cuando interactúas con tu mascota, desarrollas importantes habilidades de relación que se transfieren a las interacciones con los demás» All About Cats

MINDFULNESS SABOREANDO LA FELICIDAD

Una práctica interesante puede ser saborear la felicidad a través de tu mascota. ¿Has observado a tu mascota, sobre todo si es un perro, jugando, saltando, retozando en la nieve, chapoteando en un rio o un lago, corriendo despreocupado…embarrándose hasta las orejas…?

Es feliz, vive el presente plenamente y disfruta…disfruta tanto…lo percibes en su mirada, en sus ojos, en su forma de moverse…

Lo mismo ocurre con un gato, con un conejo, con un pájaro en otros momentos… Puedes palpar su felicidad.

Te invito a que saborees la felicidad a través de tu mascota. Saborea su felicidad.

Observa lo que hace y cómo se siente… aliméntate de su felicidad como si fuera la tuya. Como si tú fueras el que corre, el que se moja, el que salta. Observa y siente su felicidad.

MINDFULNESS EN LOS PENSAMIENTOS

Como he comentado antes, los animales viven el momento presente.

Prestan su atención, de forma intencional, a la experiencia tal y como es en el momento presente, sin juzgarla y sin evaluarla… son tan Mindful…

Cuando miro a mis mascotas… realmente veo a maestros de meditación, como dijo Eckhart Tolle. Me maravillo al observar que cuando comen, comen; cuando juegan, juegan; cuando duermen, duermen…

¿Y nosotros los seres humanos? Cuando nos sentimos conscientes y nos enfocamos en lo que está sucediendo en el momento presente, estamos experimentando atención plena. En lugar de preocuparnos por las cosas que sucedieron en el pasado o reflexionar sobre posibles eventos que podrían afectarnos en el futuro, simplemente experimentamos nuestra realidad actual.

¿Pero permanecemos en este estado de forma habitual?

Voy a poner una foto a continuación, para que podamos reflexionar.

¿Qué es lo que puede estar viviendo el perro? Pues probablemente, simplemente esté disfrutando del momento, observando el paisaje y lo que hay en él, disfrutando también de la compañía de su dueño…

¿Y qué puede estar ocurriéndole al hombre? Quizás esté pensando en lo que tiene que hacer al llegar a su casa, o lo que le espera en el trabajo, o planeando las próximas vacaciones…

¿Te suena?

Te invito a que realices una práctica de mindfulness en los pensamientos cuando estés en presencia de tu mascota. Puedes ser que estéis caminando por la calle o en un parque. Puede que estés con tu mascota en casa… Y por unos momentos, practica en la presencia, en estar consciente del momento presente. Si aparece algún pensamiento, toma consciencia de él, obsérvalo y suéltalo. No te aferres a él, no te atrapes, déjalo ir… Y regresa al momento presente.

Una y mil veces, siempre que sea necesario, con amabilidad, dirige tu atención al momento presente. A veces sólo nos damos cuenta del bullicio que hay en nuestro interior… no pasa nada. Todo está bien. Tanto si la mente se va aquietando poco a poco, como si no… estamos practicando Mindfulness.

El contacto con los animales puede ser una fuente de calma, quietud y equilibrio.

Momentos cotidianos como cuando los cepillamos o los acariciamos, pueden convertirse en un momento especial, que nos sana y nos alimenta, sobre todo si lo hacemos con atención plena.

Cuando estamos presentes, ellos también lo notan y lo sienten. Se benefician de nuestra presencia, tanto como nosotros de la suya.

¡Enriquezcamos nuestra vida con la atención plena en su compañía! Ahora ya sabemos cómo practicar Mindfulness con animales.

Mª Pilar Biota

 

¿Quieres aprender a prácticar Mindfulness? Puedes ver nuestros próximos cursos y talleres aquí